El parlamento británico investiga a un periodista por criticar a George Bush

George W. Bush se resiste a desaparecer del debate político en el Reino Unido. Que se lo digan si no a Jon Snow, presentador estrella de la cadena británica Channel 4, que afronta el calvario de una investigación parlamentaria después de hacer un comentario sobre el ex presidente en una entrevista.

El episodio se produjo en el informativo vespertino de la cadena. Snow entrevistaba a Maureen Dowd -analista política y columnista del diario 'The New York Times'- cuando se le escapó la siguiente frase: "La pesadilla ahora se ha acabado. Creo que podemos llamarla pesadilla sin que nadie nos diga que no somos objetivos".



La morcilla de Snow no pasó inadvertida a una porción de sus telespectadores, que colapsaron el teléfono de quejas de la cadena. Tampoco a los miembros de la comisión de control de los medios del Parlamento británico cuyo presidente John Whittingdale acusó ayer al presentador de vulnerar el principio de objetividad que debe imperar en los informativos de la cadena: "Por supuesto que fue un comentario tremendamente político. Todo el mundo sabe cuáles son los puntos de vista de Jon Snow, no son un secreto, pero él está obligado a seguir las mismas normas de imparcialidad que imperan para todos".

Channel 4 no se financia con fondos públicos, pero tampoco es exactamente una cadena privada. La gobierna una fundación y se rige por unos estrictos principios de imparcialidad y respeto a las minorías. De ahí el revuelo causado por los comentarios de Snow, un tipo con cierto prestigio pero cuyo carácter pendenciero le ha llevado a protagonizar distintas polémicas en los últimos años.

La cadena británica lamenta la polémica y ha tratado de excusar a su presentador alegando que su frase venía motivada por un comentario previo de su entrevistada fuera de antena: "Dowd había dicho que llegaba 'el principio de la pesadilla de la Presidencia de Bush y el comienzo de la pesadilla de informar sobre Mr. Perfecto'. Diciendo esa frase, Jon estaba intentando que repitiera esa frase. Desafortunadamente, sonó como si aquello fuera una frase suya».

Fuente: http://www.elmundo.es